Crecer en armonía

La naturaleza tiene un plan para cada niño que nace. Puso sus planes de desarrollo dentro de sí mismo. Desde un bebé, el proyecto se irá llevando a cabo paso a paso hasta llegar a la manifestación plena de todo lo que estaba planeado. Cada uno de los niños y niñas que nacen guarda en su interior la memoria genética de lo que era filogenéticamente posible, pero cada uno comienza su vida en un lugar diferente, dentro de una cultura y sujeto a condiciones únicas. ¿Cómo es posible que los posibles desarrollos siendo prácticamente infinitos, al final se logren resultados tan similares? Podríamos llamar a este fenómeno «la canción de la vida», ya que siempre tiene la misma melodía y una letra diferente para cada persona. La vida pasa por lugares similares, en un momento u otro, cada uno a su propio ritmo, pero al final todos reconocemos la melodía de los acordes.

De todos modos, tenemos un plan que es el genoma humano, en nuestra infancia tenemos tiempo para desarrollarnos y debemos hacerlo en las condiciones ambientales más diversas imaginables. Ciertamente existen límites biológicos y psicológicos que determinan la posibilidad o al menos la calidad del resultado. Situaciones extremas capaces de perturbar la melodía del desarrollo.

La Fundación Materna se propuso estudiar científicamente estos límites y las consecuencias que se derivan de ellos, para explicarlos a todos aquellos interesados ​​en el proceso de desarrollo infantil. Nuestras metas incluyen comprender la falta de armonía y sus devastadoras consecuencias cuando un niño sufre de una enfermedad en desarrollo; la investigación de programas de estimulación capaces de armonizar al máximo los desarrollos más alterados; Orientación educativa que ayuda a madres y padres a tomar decisiones armoniosas sobre el desarrollo de sus hijos.

Llevamos décadas estudiando el desarrollo natural hasta convencernos de que el orden en que se alcanzan los hitos, el tiempo necesario para alcanzarlos y la relación de interdependencia entre unos y otros aspectos del desarrollo, tiene una lógica propia, melodiosa, armónica, sin importar el paisaje en el que resuena.

Nuestro lema “Crecer en armonía” indica el doble sentido de nuestro propósito: aumentar la armonía de los procesos de desarrollo infantil y brindarles un entorno estimulante adecuado.

La Fundación Materna proporciona un instrumento para evaluar e interpretar el desarrollo de todas las personas – padres, profesionales de la salud y la educación e investigadores – con capacidad para cumplir estos objetivos. La escala de desarrollo armónico – Eda— Incorpora una metodología que, a la hora de medir el desarrollo, también sirve para comprenderlo y explicarlo.

Ahora podemos utilizar Eda con total confianza y ofrecer este servicio a toda la sociedad, en beneficio de mejores personas, un mejor futuro y más felicidad.